jueves, 1 de agosto de 2019

NO RECORDARE MI NOMBRE

Temo que en muy pocos años.
Pueda perder la cabeza.
Que no recuerde mi nombre.
Y no sepa como hilar.
 Las palabras de un poema.

Que vuelva a ser una niña.
Con una mirada añeja.
Arrugada de nostalgias
Apegadas al pasado.
E ignorante de las nuevas.

Ya no habrá papel ni pluma.
Revoloteando en mi mesa.
 No esperaré que las Musas.
Sobrevuelen mi cabeza.

Ni emborronaré cuartillas.
De ideas rocambolescas.
Porque el campo del olvido.
Hará añicos mi floresta.

Llamaré quedo a mi madre.
Que apostada tras la puerta.
Me llevará de su mano.
A las campiñas celestes.
Con un exiguo equipaje.
Por una vereda, recta.
( Bruma )